Las Botargas de Romanones en Guadalajara

Las Botargas de Romanones en Guadalajara

Hacía mucho tiempo que no iba a una fiesta tradicional y, como es bueno volver a las buenas costumbres, esta vez nos vamos a Castilla La Mancha, a un pequeño municipio de Guadalajara llamado Romanones para conocer sus botargas.

Esta fiesta tradicional, las botargas de Romanones en Guadalajara, como otras mascaradas, se ha recuperado hace pocos años, concretamente en 2015. Si bien no se conoce exactamente de que año datan las botargas de Romanones en Guadalajara, sí que se sabe que se dejaron de hacer hace más de 150 años.

En esta fiesta los dos personajes que llevan la batuta son los que presiden con su foto el comienzo del reportaje,  “El Tío Tararura” y “El Toro del Carnaval“, aunque son bien acompañados por las Mascaritas y las dulzainas.

Las Botargas de Romanones en Guadalajara

Las Botargas de Romanones en Guadalajara se celebran el fin de semana antes de Carnaval por la mañana. Así,  me dispuse todo el día de antes para poder realizar el reportaje sin problemas, y al día siguiente, a las 11:30h de la mañana, ya me encontraba recorriendo el pequeño Romanones. Algo que me sorprendió bastante para bien, la verdad, es que se veía muy poca gente por el pueblo, solo algún que otro paisano que entraba y salía  del ultramarinos.

Esto pintaba bien, las fiestas tradicionales están demasiado masificadas últimamente, y es complejo no sólo poder realizar un buen reportaje sino, también, disfrutar del ambiente con los paisanos del pueblo.

Eso sí, como no veía mucha gente, he de deciros que, inicialmente, pensé que me había confundido, menos mal que al poco tiempo ya vi a los músicos que se acercaban a una casa de donde empezaron a salir Mascaritas.

Las Mascaritas son en su mayoría mujeres, como podéis ver en las fotos, aunque tambien hay algún hombre.

Una vez que todas las Mascaritas están preparadas, incluso las más pequeñas je, je, je comienza un pasacalles con dulzainas recorriendo todo el pueblo.

Inicialmente el pasacalles es bastante tranquilo, hasta que aparece el Tío Tararura y el Toro del Carnaval. Así, os contaré que cuando yo estuve, como no sabía la historia, lo primero que pensé fue, -¡bah!, con el pasacalles se termina todo, menuda fiesta ésta-, pero empecé a observar alrededor, y enseguida me di cuenta de que se veía a la gente y, en especial, a los chiquillos bastante nerviosos.

De casualidad, en lo alto de una calle, de repente, vi algo raro que cuando volví a mirar no vi. Así, me mosqueé y fui a mirar con más detalle, y ¡fíjate tú!, cuál fue mi sorpresa cuando me encontré con el Tío Tararura escondido detrás de un murete para que nadie le viera y poder asustar a la gente je, je, je, menudo granujilla. Me hice el disimulado y me fui a otro sitio para fotografiarlo cuando saliera.

Y aquí fue donde empezaron las persecuciones por todo el pueblo, y yo corriendo detrás esquivando a todos y haciendo fotos.

Al poco rato, para darle más emoción al tema, apareció, esta vez sin esperármelo, el Toro del Carnaval, y aquello ya fue un jaleo porque había que esquivar a los dos.

Estos dos personajes de Las botargas de Romanones en Guadalajara son los grandes protagonistas de la fiesta. El Tío Tararura, que podría decirse que es como el famoso hombre del saco, se dedica a hacer fechorías, sobre todo a los niños, aunque de refilón tambien pilla a algún adulto de vez en cuando. Por su parte, el Toro del Carnaval, que se asemeja a un toro  llevando un armazón con unos cuernos, un rabo y un cencerro, se encarga de ir asustando a la gente y, si se puede, además, darle algún que otro susto con una pequeña y suave, por así decirlo, cornada.

El pasacalles continúa con la gente huyendo de los dos protagonistas anteriores hasta que se llega a la Plaza Mayor, en dónde se simula una pequeña capea para dar “muerte” al toro. Deciros que en mi caso, tanto el Tío Tararua como el Toro del Carnaval lo hacían genial.

Después, a eso de la una de la tarde, cuando ya parece que todo se ha terminado, aparecen la Mascaritas y se disponen a repartir vino dulce y pastas a toda la gente que allí se encuentra y, anda que no viene bien, después de la carrerita esquivando a los dos personajes anteriores, je, je, je.

Y, claro, el Tío Tararura comparte su bota de vino con el que se precie.

Las Botargas de Romanones en Guadalajara, datos prácticos.

Se celebra el fin de semana antes de carnaval.

Localización Google maps Romanones 

Horario de 11:30 a 14:00. Por la tarde hay un baile de  disfraces en las escuelas abierto al publico.

Esta gente es maravillosa, hacía mucho tiempo que no me trataban con tanto cariño, y además me agradecieran que fuera a hacerles fotos, así da gusto, la verdad.

Altamente recomendable y muy cerca de Madrid. ¿Te atreves?.