En este reportaje de la ruta de la cerveza en Valonia me voy a centrar en la Abadía Maredsous, un lugar idílico para los amantes del oro líquido y todo un descubrimiento para el que suscribe, aunque con alguna decepción.
Después de nuestro primer día en Dinant visitando el pueblo y la Abadía Leffe, a tan solo 20 kilómetros encontramos un paraíso, la Abadía Maredsous.
La historia cuenta que la abadía nace por el deseo de un joven monje Hildebrand de Hemptinne y de una familia industrial adinerada en 1872.
La Revolución Francesa había acabado con muchas comunidades monacales de la región, pero con la formación de Bélgica y con la revolución industrial muchos monasterios se recuperaron y otros se fundaron. Los monasterios tenían que valerse por ellos mismos y generar ingresos, así pues empezaron a vender cerveza.
En este inmenso edificio viven a día de hoy 30 monjes.
Patio interior de la Abadía Maredsous
Entrada a la Abadía Maredsous
Interior de la iglesia
Uno de los pasillos de las estancias de la Abadía Maredsous
Biblioteca
Sala de rezos de la Abadía
Esta sala no se cómo se llama pero era la que más me gusto con todos los hábitos.
Los jardines de la abadía y quiero imaginarme que la bici es de un monje
Algo curioso es el cementerio, y no solo por lo discreto que es, sino por una de las tumbas que acoge, la de François Atout, un monje benedictino que dio con la fórmula de la cerveza de abadía en 1905. Aunque desde 1916 la cerveza Duvel se encarga de su producción, la receta aporta a esta abadía miles de euros anuales gracias a los derechos de la misma.
Cementerio
Bueno, todo esto es muy “bonico” pero vamos a catar la cerveza ¿no?. La verdad que lo primero que ves al llegar es la zona de restaurante/bar y, no te voy a engañar, fue lo primero que visité, tomando alguna cerveza con su queso de vaca y algo parecido al salami.
Decirte que en esta abadía trabajan unas 300 personas, para dar servicio a todos los visitantes, tanto en el restaurante como en la venta de cerveza.
Aquí me dijeron que sólo se podía comprar cerveza Maredsous en Bélgica, que no exportaban, pero yo sí la he visto en España. Imagino que me querían vender alguna caja.
La decepción que te comentaba en el principio es que me esperaba ver a los monjes haciendo la cerveza, llamadme romántico, pero la industria destroza un poco la magia de la cerveza de Abadía. Aún así, te digo que es la cerveza que más me gustó e hice cata de muchas y muy variadas cervezas belgas, como podrás imaginar.
Entrada Abadía Maredsous: 6€ por persona
Horario de apertura de taquilla: 13 horas con visitas guiadas de 14 h a 16 h
Maredsous triple 33 cl: 3,90 €
Maredsous Brune 33 cl: 3,40 €
Maredsous Blonde 33 cl: 2,80 €
Tabla de degustación con 3 cervezas, triple, brune, blonde y queso: 8,95 €
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Muchas gracias por seguir con tu crónica de la ruta de la cerveza de Valonia, con unas fotos tan espectaculares como todas las tuyas